viernes, 27 de noviembre de 2009
La relación entre amor y muerte es estrecha. El amar y el matar se relacionan de sobremanera, aunque vos me lo niegues. Yo como dermatologo he amado muchas personas. Mejor dicho pies. He lamido su piel de principio a fin y he matado. El amor y la muerte son sentimientos extremos, sentimientos lujuriosos. Matar a quien amas puede ser el mayor placer jamaz sentido por la humanidad. Lo amé lo amé a ese hombre de pies perfectos. Los huesos de sus dedos eran finos y proporcionados. No tenia cayos, no tenia uñas encarnadas. Parecía el pie de una mujer. Mi primer instinto fue arrancárselo y tenerlo por siempre conmigo, pero se pudriría. Entonces lo quise a el entero. Nunca amé el hombre, amé el pie, y ninguno de los dos mostró interés hacia mi. Como no pude obtenerlo los maté, al pie y al hombre, con el mas afilado de mis cuchillos. Todabia recuerdo la sangre mas sabrosa en mis labios, y estallar de placer.
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1 comentario:
Yo, nunca.
(Vivita y coleando eh)
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